Tentando aprender a traduzir a partir dos exemplos de tradução humana.
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and as elections approach, the spotlight is being beamed on the army generals who have vowed their allegiance to long time ruler robert mugabe.
y mientras las elecciones se acercan, la atención está en los generales del ejército que expresaron su lealtad al antiguo gobernante robert mugabe.
the chung shi pilot pro multi functional watch is equipped with extensive functions for measuring heart beat, time, air pressure, calorie consumption and even direction.
además el chung shi pilot pro multi functional watch está equipado con múltiples funciones para medir el pulso, tiempo, la presión del aire, el consumo de calorías y hasta los puntos cardinales.
'perhaps not,' alice cautiously replied: 'but i know i have to beat time when i learn music.'
--creo que no --respondió alicia con cautela--. pero en la clase de música tengo que marcar el tiempo con palmadas.
as the ropes beat time, a group of 20 acrobats, endowed with exceptional co-ordination and rhythm, perform a steady stream of solo, duo and group jumps and figures.
un grupo de 20 acróbatas, dotados de una coordinación y un sentido del ritmo excepcionales, ejecutan una serie ininterrumpida de saltos y figuras en solitario, en dúo o en grupo.
the natural way to dance on this music consists in going over main beat (times 1 and 3 of measurement at 4 times).
la manera natural de bailar sobre esta música consiste en caminar sobre el tiempo fuerte (el tiempo 1 y 3 de la medida a 4 tiempos).
"violets, the elf told me," continued the mouse, "are for the sight, the smell, and the touch; so we have only now to produce the effect of hearing and tasting;" and then, as the little mouse beat time with her staff, there came sounds of music, not such music as was heard in the forest, at the elfin feast, but such as is often heard in the kitchen– the sounds of boiling and roasting.
«las violetas son para el olfato, la vista y el tacto - dijo el elfo -; pero tendremos que darte también algo para el oído y el gusto». y la ratita se puso a marcar el compás, y empezó a oírse una música, pero no como la que había sonado en la fiesta de los elfos del bosque, sino como la que se suele oír en las cocinas. ¡uf, qué barullo!